Llegar desde Buenos Aires no toma más de una hora y media. Alrededor de esta población de poco más de 15 mil habitantes, todo es campo, estancias y alguna posada que invitan a vivir un fin de semana tranquilo.
“Los Berni”
Así se conoce localmente a los murales que colorean la capilla perteneciente al Instituto San Luis Gonzaga (en el que se cursan los ciclos de educación primaria y secundaria y además profesorado para adultos), fundado por el padre Hipólito Pordomingo. La austeridad de su arquitectura contrasta con la apasionada explosión de colores de La Crucifixión y El Apocalipsis que realizara Antonio Berni en 1981, con motivo del vigésimo aniversario del instituto. Ambas obras en acrílico, que ocupan 15 m2, se ubican a ambos lados del altar. La expresionista visión del bien y el mal del maestro Berni, atrae tanto a los residentes asiduos a la capilla como a los visitantes que, enterados de su existencia, estiran un poco el paseo antes de abandonar Las Heras.
Instituto San Luis Gonzaga.
"Lo de Chiapa"
En los alrededores de la plaza principal, se encuentra el Museo Los tres Carlos. Sus salas reúnen una ecléctica colección de elementos de uso doméstico acumulada por el talabartero Carlos Chiapa, quien bautizó así el museo en honor a su padre y a su abuelo, de quienes heredó nombre y apellido. Fotografías, diarios, vestimentas y máquinas relatan la historia de su pueblo. Ana, la viuda de Chiapa, es la encargada de guiar a los visitantes. Si los nota entusiasmados, los hace pasar a su casa para enseñarles el taller de don Carlos.
Museo Los Tres Carlos.
"Lo de Esteban Semino"
Detrás de la estación de tren, funcionan la pinacoteca y el museo de este artista plástico natural de Las Heras. Manejado por quien fue su musa, Amalia. A los 99 años, con la colaboración de su sobrina Lucrecia, recibe al público para mostrar una colección de más de 150 obras que se exhiben en cuatro habitaciones. Algunas son del propio Semino pero la mayoría pertenece a palabras mayores de la pintura nacional, como Juan Carlos Castagnino, Enrique Policastro, Lino Enea Spilimbergo, Alberto Bruzzone, Antonio Berni y Raúl Soldi, amigos que le obsequiaban sus trabajos. De Castagnino se conserva una Maternidad, hecha en 1958, y El matadero, de Policastro, fue, según cuenta la propia Amalia, fruto de un pícaro desafío entre el autor y su marido.
Pinacoteca Esteban Semino.
La Armonía
Es el nombre de una estancia que cuenta con más de 150 años y que sirvió de núcleo para el nacimiento del partido. Construida en 1857, perteneció inicialmente a la familia Zamudio, que en la época fundacional del partido (creado en 1864) donó parte de sus tierras para impulsar el desarrollo de la población cabecera. En la actualidad es propiedad de Alberto Gallegos Luque, descendiente directo de los Zamudio, quien, al igual que sus antecesores, procura con esmero mantener la arquitectura del casco fiel a su origen. La estancia queda en dirección a Navarro y hasta hace muy poco era posible llegar hasta allí para visitarla; no es el caso ahora, pero de todas formas conviene saber que aquí es donde empezó la historia de un pueblo de Buenos Aires, eminentemente ganadero.
Templo Parroquial San Cipriano
En la plaza principal. Es el edificio más alto de Las Heras y uno de los más antiguos: data de 1882.
CÓMO LLEGAR
Desde la capital, por autopistas Riccheri y Ezeiza-Cañuelas y después ruta 6. Por ésta son 30 km hasta doblar a la izquierda por la ruta 40 (ex 200), que lleva a Las Heras. También se puede ir por Acceso Oeste hasta ruta 6 y 30 km después, girar a la derecha para tomar la mencionada 40.
En cuanto al transporte público, la línea de tren Sarmiento cuenta con un ramal que sale de Once y llega a Lobos, parada en Las Heras mediante. Consultá horarios y tarifas.
DÓNDE COMER
Matute
Local centenario. Su dueño, Juan Prado, sugiere picadas con productos de la zona y platos robustos como mondongo y cazuelas. El postre más pedido es el flan casero. Abierto mediodía y noche. Se abona sólo en efectivo.
Segundo acto
De jueves a domingos por la noche. Los fines de semana también al mediodía. Cocina de autor a cargo de Santiago Healy. La carta se renueva cada dos o tres meses. Lo que no pueden faltar son los lomos, bife de chorizo carnes y las pastas caseras. Un clásico son los crepes de pollo.
Bar y Vinoteca La Cava del Lolo
Funciona en la antigua casa Viola, otrora almacén de ramos generales. En esta flamante vinoteca también funciona un bar donde las protagonistas son las picadas con fiambres caseros y la fondue de queso. Además, los fines de semana suenan bandas en vivo que pasan de la milonga hasta la bossa nova. La vinoteca está comandada por Sofía Matute, nieta del mismísimo Oscar "Lolo" Matute, que fue el dueño original del bar que hoy todavía lleva su apellido. Martes a domingo de 9.30 a 13.30 y desde las 17.30 en adelante. Sólo efectivo.
DÓNDE DORMIR
La Pasionaria
En un retazo de campo de General Las Heras se esconde una muy colorida casa, acondicionada para ocuparla como propia durante dos o más días. Con capacidad para 7 personas, está ambientada con un estilo entre palermitano y campestre. También es base para las salidas en bici que organiza su dueña, Silvina Pedrotti. Recientemente acaba de incorporar como suite el “Expreso el nidito", dentro de un antiguo vagón de tren de carga que solía funcionar como estar. Tiene un gran deck sobre el campo, wifi, aire acondicionado, heladerita, cafetera y hasta una parrilla privada. Esta propuesta combina el paisaje y el estilo de La Pasionaria sin sus servicios, para ofrecer un espacio que se deja vivir a propio ritmo y de manera íntima.
Quienes quieran disfrutar de un día de campo también pueden hacerlo con reserva previa. A partir de septiembre, no se suspenderá por lluvia porque para entonces estará inaugurado un quincho con capacidad para 30 personas.
La Pasionaria. www.posadalapasionaria.com.ar
La Eloisa
Propone vida de campo a ritmo de caminatas y paseos en bici, en carro y caballo.
Todo empezó con la pasión de sus propietarios por el polo y el entusiasmo de los jugadores extranjeros por amanecer en el mismo escenario donde el deporte tiene lugar. El dato fue pasando entre los polistas hasta que se acondicionaron los cuartos y se hicieron los respectivos baños en el casco principal (una construcción de estilo inglés de los 60) y en dos casas más -una también de estilo inglés (la Casa de Campo) y otra (La Aguada), de típica arquitectura rural pampeana.Las 3 opciones de alojamiento se encuentran salpicadas en las 10 hectáreas de parque que además alberga 3 canchas de polo, una de golf (9 hoyos par 36), una de tenis y una de paddle, dos piscinas, un quincho y dos caballerizas.
La Eloisa. www.pololaeloisa.com
COMPRAS
Talabartería Las Heras
Objetos de cuero, platería y todo lo necesario para la práctica de polo, salto y pato.
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